GUIA PARA LA ACCIÓN (NO. 12)

Por Pelegrín Castillo Semán1. A quien le debe sorprender que después de años de vacilación, inconsistencia, temores en la aplicación de las políticas de nacionalidad y migración por parte de las autoridades ejecutivas, terminemos viendo las sobrinas de los senadores norteamericanos visitándonos junto con sus agentes locales para formular más exigencias e imponer directrices.2. Tristemente, el Vicepresidente de la República al igual que el Secretario de Interior insisten en afirmar que el régimen de la nacionalidad se aclarará a partir de la nueva Reforma Constitucional……demostrando que no aceptan ni respetan la jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia sobre este asunto, ni mucho menos la definición de tránsito que consagró la Ley de Migración, que tampoco se aplica, para complacer los poderes foráneos…..¿Por qué los dominicanos tendremos que aceptar esa nueva política, hija de la imposición?3. Terreno minado: los norteamericanos no deberían olvidar los peligros que entraña obtener concesiones de autoridades débiles, vacilantes complacientes……. en gobiernos vulnerables por más de una razón……sobre asuntos vitales que amenazan la existencia de una nación. No sólo es abusivo e inmoral sino la segura causa de grandes trastornos y resentimientos históricos4. Para ser creíble la lucha contra la corrupción y el narcotráfico que promueven los Estados Unidos -incluido el recurso del retiro de visado- esta no debe ser acomodaticia, selectiva, ni guiada por doble rasero. Mucho menos debe ser instrumentalizada para lograr objetivos en otras agendas geopolíticas, insulares y regionales. Además, una política exterior con esos retorcimientos y trasfondos carece de honor y no conduce a nada bueno……5. La Soberanía, La Soberanía, ¡La Soberanía!. Cuando los que gobiernan no creen seriamente –con todas sus consecuencias –que se deben al pueblo que los elige y que los necesita…….porque en su fuero interno entienden que el verdadero Poder está afuera y arriba, es difícil lograr que las instituciones democráticas funcionen….Después de todo, nadie puede servir a dos señores.6. Si nosotros los dominicanos no defendemos nuestros intereses nacionales, quien los va a defender, sino nos respetamos ¿quién nos respetará.7. Nadie que no esté dispuesto a asumir todos los riesgos – de la vida, la integridad física, la tranquilidad, el buen nombre- para defender los intereses de su Patria Nación, debería aspirar a gobernarla y representarla.8. Ante el continuo bombardeo de droga, reiteración de reclamo: es preciso enviar al Congreso para su conocimiento, aprobación o rechazo, los acuerdos CNIES, suscritos por el gobierno dominicano con los Estados Unidos, que autorizan la vigilancia e intervención del espacio aéreo y marítimo de la República, y que a pesar de su carácter secreto, fueron invocados para oponerse a una legislación de interceptación de las operaciones de narcotráfico.pelegrincastillofnp@hotmail.com01 julio de 2009